Las seis mujeres han contado cómo ellas son capaces de superar barreras y tener éxito en profesiones o áreas tradicionalmente masculinas.
Esta mañana se ha celebrado en Madrid la mesa de debate “Mujeres excepcionales: el valor de una oportunidad” bajo la presidencia de S.M. la Reina y organizada por la Fundación Microfinanzas BBVA (FMBBVA), para contar cómo ellas son capaces de superar barreras y tener éxito en profesiones o áreas tradicionalmente masculinas. Seis mujeres: la artista Lita Cabellut, una comandante del Ejército del Aire, una jugadora de la selección española de rugby, una instaladora de gas y empresaria, una universitaria de ciencias y una camionera y microemprendedora a la que atiende la Fundación, han sido las grandes protagonistas de este acto. El presidente de BBVA, Carlos Torres Vila; el director general de la FMBBVA, Javier M. Flores; y la ministra de Economía, Nadia Calviño, también han participado.
“Estas historias nos inspiran a todos a seguir trabajando por una sociedad más diversa e inclusiva”, ha dicho el presidente del banco al inicio del debate, y ha descrito a las seis participantes como “referentes y el mejor ejemplo del valor que tiene una oportunidad”. Durante el acto, se ha hablado de educación, inclusión financiera y emprendimiento femenino, y de los estereotipos en trabajos y deportes considerados masculinos, entre otros temas.
La oportunidad que cambió sus vidas
Para la prestigiosa artista Lita Cabellut, la oportunidad llegó con sus padres adoptivos: “Me acercaron a la cultura, gracias a ellos descubrí mi pasión por la pintura”. En el caso de Guisela Martínez, de Perú, fue un microcrédito lo que le permitió progresar con su pequeño negocio de transporte y venta de carbón, en un país donde sólo el 35% de las mujeres tiene una cuenta bancaria. “La Fundación Microfinanzas BBVA me tendió la mano cuando ninguna otra entidad lo hizo. No solo me presta el dinero, también me enseña a gestionarlo”, ha contado.
Según Carlos Torres Vila, “para BBVA, la educación es la gran oportunidad para mejorar la vida de las personas. Y en nuestro propósito de poner al alcance de todos las oportunidades de esta nueva era, la Fundación Microfinanzas BBVA atiende a más de dos millones de personas en vulnerabilidad, de las cuales, 1,2 millones son mujeres”.
La educación, pilar del progreso y el desarrollo profesional
Según ha dicho la Reina, “la educación es un tema prioritario desde primaria y secundaria; y el papel de las familias y de los profesores, a los que hay que reconocer su labor, fundamental para garantizar la igualdad de oportunidades”. La granadina Rosa Muñoz, estudiante de Geología, ha contado que en su caso fue muy importante el apoyo de su abuela, que aprendió a escribir a los 65 años, el de sus padres y el de sus profesores, que creyeron en ella cuando más lo necesitó. Rosa, de etnia gitana, ha contado orgullosa que es la primera de su familia en ir a la universidad y que, aunque trabaja para pagarse los estudios, sabe que pronto será paleontóloga, su sueño. Según la Fundación Secretariado Gitano, tan solo el 1% de la población gitana en España va a la universidad. “Una mujer gitana y universitaria no se ve todos los días”, ha dicho.
“La educación es un tema clave para el futuro de este país y del mundo”, ha asegurado la ministra de Economía, Nadia Calviño. Todas las participantes han coincidido en la importancia de formarse, incluso siendo ya profesional. La comandante Gómez, a pesar de conseguir convertirse en la primera mujer piloto de la Patrulla Aspa (helicópteros del Ejército del Aire) y la primera mujer comandante del escuadrón 402 (responsable de los traslados de Casa Real y presidencia del Gobierno), sigue estudiando. “Soy licenciada en filología inglesa y ahora estudio Geografía e Historia, además de aprender francés. Soy una empollona”, asegura esta pionera, que forma parte del 4,8% de mujeres pilotos que hay en el Ejército del Aire. Y añade: “Lo que hace falta es ilusión, con eso se consigue todo”.
A la jugadora de la selección española de rugby, Lourdes Alameda, eso es precisamente lo que nunca le ha faltado, ilusión: también conoce bien lo que es abrirse camino en un mundo tradicionalmente de hombres. Empezó con la gimnasia rítmica a los tres años, pero pronto descubrió otros deportes como el tenis o el bádminton hasta que el rugby la cautivó. Compagina la carrera de Biología con la selección española femenina, bicampeona de Europa, que batió récord de asistencia en la final disputada en Madrid el pasado mes de marzo con 9.000 personas. Además, juega y entrena en el Sanse Scrums, el club de rugby de San Sebastián de los Reyes. “Intento transmitir a los niños y niñas que luchen por lo que les gusta. Yo decidí jugar al rugby porque era un deporte que no conocía. Otros deportes como gimnasia rítmica parece que es raro que lo haga un chico; hay que cambiar estos prejuicios”, ha comentado.
Según ONU Mujeres, siete de cada diez niños y niñas consideran que se incentiva más el deporte en ellos que en ellas. Una situación similar sucede en sectores como el de la fontanería e instalación de gas, donde las mujeres solo representan el 1%, señala la Confederación Nacional de Asociaciones de Instaladores y Fluidos (CONAIF), integrado por 20.000 empresas españolas. “A pesar de ser la quinta de cuatro hermanos hombres, fui yo la que me hice cargo de la fontanería familiar cuando mi padre se jubiló. Lo aprendí todo de él. Nunca me he sentido discriminada por ser mujer, aunque las únicas mujeres que he conocido en este sector son las esposas de los instaladores. Hace falta dar más visibilidad a lo que hacemos para generar interés”, ha contado la valenciana Magdalena Verdú, instaladora de gas y empresaria.