Reinventarse en medio de la adversidad: La Historia de Enereida Vega

Hace unos años, el fallecimiento de un gran amigo y socio de trabajo puso en jaque la posibilidad que tenía Enereida Vega de contar con una fuente estable de ingresos. La pérdida personal y quedarse también sin el trabajo que tenía desde hacía más de siete años, la obligaron a reinventarse.

Revisando sus orígenes encontramos parte de su inspiración: Nació en Playa Leona, un pequeño pueblo de La Chorrera en Panamá, ubicado a orillas del Océano Pacífico y cuyos habitantes se dedican a la pesca artesanal, la agricultura y la ganadería. Por eso Enereida, en medio de la incertidumbre, se planteó que el amplio conocimiento que tenía sobre mariscos, gracias a haber crecido en una comunidad pesquera, podría convertirse en una oportunidad de negocio.

Y así empezó su camino como emprendedora independiente, se armó  de valor y, junto a su esposo, montaron su propio negocio de compra y venta de mariscos en su comunidad.  “Al principio era difícil y, como no teníamos capital, un familiar me habló de Microserfin, la entidad panameña de la Fundación Microfinanzas BBVA. Allí me dieron la oportunidad y de eso pude surgir con mi negocio”, explica la emprendedora. 

Mientras Enereida lleva la estrategia, el liderazgo y las cuentas,  en la tierra, su esposo se encarga de capitanear el negocio en el mar con la pesca de los productos que después comercializan. Un trabajo en equipo y un esfuerzo conjunto que hacen diariamente por el futuro de sus dos hijos, “Tenemos una hija universitaria y un niño de 9 años que está en cuarto grado. Nuestro deseo es que sean unos profesionales, por eso siempre les decimos que tienen que estudiar para que sean alguien grande en la vida” afirma.

Esta  emprendedora asegura que “aquí mucha gente depende de nuestra actividad”, puesto que junto a su esposo dan  empleo a tres jóvenes de su comunidad como pescadores y contratan  a mujeres cuando requieren preparar grandes cantidades de pedidos.

Enereida Vega, emprendedora panameña, con su esposo y su hijo de 9 años

Crédito digital

Para salir de mi comunidad me podría demorar más de medio día. Por eso decidí tomar un crédito digital 

Enereida es una de las emprendedoras que viven en primera persona la transformación digital de la FMBBVA y su entidad en Panamá. Y es que, ella fue la primera en obtener un crédito 100% digital, como parte de un proyecto piloto impulsado por Microserfin.

Cuenta que cuando le ofrecieron el crédito, le cayó como anillo al dedo porque justo ese día, la principal herramienta de trabajo de su esposo su “lancha” tenía el motor dañado. “El dinero  que tenía lo tuve que invertir en la reparación del motor y me había quedado sin recursos para la compra del marisco. Así que llamé a mi asesor y fue allí cuando me dijeron que tenía dos opciones: Ir a la oficina o tomar el crédito digital”.

Dice que tomar la decisión no fue tan difícil, y que a pesar de que no tenía mucho conocimiento sobre el manejo de la tecnología en general, apostó por tomar el crédito digital para obtener los recursos de forma inmediata directamente en su cuenta financiera y ahorrarse tiempo y dinero en desplazamientos. “En Playa Leona tenemos un problema de transporte porque no tiene horario establecido, salir de mi comunidad me podría demorar más de medio día. Por eso decidí tomarlo digital”. 

A fecha de hoy, Enereida Vega ya ha obtenido tres créditos con Microserfin con los que ha podido impulsar su negocio y hoy motiva a otros microempresarios como ella a que se animen y sigan el camino del emprendimiento: “Con lo que he logrado me siento bien, me siento una mujer empoderada”.

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