Las Becas DIME de la FMBBVA son una oportunidad única de acercarse a la realidad de millones de personas que recurren al emprendimiento para salir adelante y que siempre son un ejemplo de superación, por el esfuerzo que hacen para sacar adelante a sus familias.
Este verano, 15 universitarios españoles iban a viajar a América Latina para conocer de primera mano la labor de la Fundación Microfinanzas BBVA. Son la tercera promoción de unas becas referentes en el sector del desarrollo. Sin embargo, las circunstancias actuales han obligado a posponer esta edición de las Becas DIME (Desarrollo, Inclusión, Microfinanzas y Emprendimiento) de la FMBBVA, por lo menos hasta el verano del año que viene.
Esta decisión se ha tomado también de acuerdo a las recomendaciones de las entidades de la Fundación que, desde hace dos años, son las que acogen a estos universitarios para mostrarles su día a día en las oficinas y que participen en su labor sobre el terreno, atendiendo a los emprendedores.
Actualmente, y desde que empezó la emergencia sanitaria, las seis entidades de la FMBBVA trabajan centradas en tres objetivos prioritarios: la salud de todos, tanto de los más de 2,2 millones de personas a las que atienden como de sus 8.300 empleados; la continuidad de la actividad, por ser considerada un servicio esencial para la población; y la sostenibilidad de este modelo de banca relacional, para garantizar el cumplimiento del propósito, y seguir atendiendo a emprendedores con pocos recursos.
“Por lo importante que es para nosotros este proyecto y por el compromiso que adquirimos con los seleccionados entre más de 700 candidatos, vamos a guardar las 15 plazas adjudicadas para cuando podamos reanudar esta edición”, comenta el responsable del programa de becas de la Fundación Microfinanzas BBVA, Víctor Herrero. Y añade que, de quedarse una vacante libre, también se tendrá en cuenta a las personas que quedaron en lista de espera.
Las Becas DIME de la FMBBVA son una oportunidad única de acercarse a la realidad de millones de personas que recurren al emprendimiento para mejorar sus vidas y que siempre son un ejemplo de superación, por el esfuerzo que hacen para sacar adelante a sus familias. Un ejemplo más grande si cabe en estos momentos difíciles que para ellos supone un reto aún mayor.