Financiera Confianza
Banco Adopem
Fondo Esperanza
Microserfin
Fundación Microfinanzas BBVA
No todas las becas son iguales. Cuando permiten viajar y conocer otras culturas, adquirir conocimientos, y entender de primera mano la situación de emprendedores de escasos recursos, con historias de superación que son un ejemplo de vida único, se convierten en una oportunidad excepcional.
Esta experiencia la han vivido los 19 universitarios ganadores de las Becas Desarrollo, Inclusión, Microfinanzas y Emprendimiento (Becas DIME) de la Fundación Microfinanzas BBVA (FMBBVA). Acaban de regresar a España tras comprobar en persona cómo las microfinanzas están cambiando las vidas de los emprendedores a los que atiende la Fundación.
Conocer las necesidades reales de los emprendedores, clave para ayudarles a progresar
Emprender nunca es fácil
Se necesita financiación y formación en la administración de negocios. Lograr las dos cosas es aún más complicado cuando se trata de personas en vulnerabilidad, cuyos recursos económicos se destinan a cubrir necesidades básicas y que, en muchos casos, tienen menor nivel educativo.
Los becados lo han comprobado acompañando a los asesores de crédito en sus visitas a los negocios de los emprendedores, en sus tiendas o sus cultivos.
Elena García, que ha realizado su beca en Bancamía, la entidad colombiana de la FMBBVA, explica que le ha sorprendido «el concepto de banca relacional basado en la confianza, la cercanía y el trato humano para conocer mejor a cada microempresario y sus necesidades».
«Me pareció especialmente importante la inversión en educación financiera y el trabajo de campo de los asesores», añade. «Las finanzas productivas tienen el potencial eficaz de transformar la situación de las personas más vulnerables, fomentando el crecimiento de sus negocios y atendiendo sus necesidades socioeconómicas».
Por su parte, Elvira Manzanedo, otra de las becadas que ha viajado a Colombia, señala que «trabajar y emprender no es, ni mucho menos, la opción fácil, pero sí la opción honesta y responsable. Bancamía debe enorgullecerse de contribuir a crear oportunidades».
Alessandra Palomar, que ha realizado su beca en Banco Adopem, la entidad dominicana de la FMBBVA, también resalta que las entidades de microfinanzas «llegan a donde otros bancos no llegan y eso es muy loable. Contribuyen al tejido emprendedor de las regiones, dándoles la oportunidad a los emprendedores de crecer y salir del sistema informal y generando estabilidad económica para ellos”.
Una lección de vida y un ejemplo a seguir
Los becados de estas dos promociones de las Becas DIME (la anterior edición quedo en suspenso por la pandemia) coinciden en que la mejor experiencia es conocer en persona a los emprendedores porque son un ejemplo de superación y de ganas de progresar.
Lo que más ha valorado Marina Galilea, becada en Fondo Esperanza, entidad chilena de la FMBBVA, ha sido “ponerle cara y voz a todas esas personas que son los protagonistas reales de las becas, los emprendedores, ver la realidad de su día a día, ver cómo trabajan y los proyectos que está desarrollando la Fundación allí”.
“He conocido gente maravillosa. Con unas historias, un carácter y un coraje que es difícil de encontrar”, coincide Sara Barroso, becada en Banco Adopem.
Los becados de las dos promociones de las Becas DIME coinciden en que la mejor experiencia es conocer en persona a los emprendedores
«Me he contagiado del espíritu emprendedor y luchador de los microemprendedores, para ir cada día con más perseverancia y determinación hacia mis objetivos en la vida. La admiración hacia ellos ha calado en mí, y ese es el principal cambio que me llevo de esta experiencia», recalca Jorge Bautista, becado en Microserfin, la entidad panameña de la FMBBVA.
El compromiso de la FMBBVA con el desarrollo de América Latina
Uno de los objetivos de las becas DIME es que los becados conozcan la importancia social que tienen las microfinanzas en Latinoamérica. La misión de la FMBBVA, alineada con el cumplimiento de los ODS de Naciones Unidas, engloba una visión de la pobreza en todas sus dimensiones: económica, social o de acceso a servicios básicos como salud o educación. Y los becados lo han comprobado durante su paso por las entidades de la Fundación.
Aitana López de Argumedo, becada en Fondo Esperanza, recalca que “la verdadera propuesta de valor de la entidad es el desarrollo económico, profesional y familiar que consigue para las emprendedoras. Gracias a su modelo de redes de apoyo y educación consiguen que mejoren, crezcan y puedan esperar un futuro mejor”.
Su compañero en la beca, Francesc Almendros, coincide con ella: «He visto cómo las redes de apoyo y la ayuda intercomunitaria en espacios de vulnerabilidad son esenciales para el progreso de la sociedad».
Gonzalo Gómez de la Calle, que ha realizado su beca en Financiera Confianza, la entidad peruana de la FMBBVA, ha comprobado la importancia de que esta entidad apoye al empoderamiento de las mujeres y el progreso de las zonas rurales y alaba su contribución al desarrollo de Perú.
Todos ellos han pasado un mes intenso a miles de kilómetros de casa, en una experiencia enriquecedora, todo un aprendizaje sobre inclusión y desarrollo.