Detrás del propósito: Miriam Araúz, emprendedora de la FMBBVA en Panamá
Diversos estudios demuestran que, lograr la igualdad de género y la autonomía económica de las mujeres contribuye directamente al impulso de la economía y a crear sociedades más inclusivas. Según el Banco Mundial si se redujeran las brechas de género, se inyectarían unos 172 billones de dólares a la economía global, es decir, el PIB per cápita podría aumentar un 20%.
Por eso, apostar por las mujeres es invertir en un futuro más próspero y equitativo. Ellas son piedras angulares en el desarrollo tanto propio como en el de sus familias, los datos demuestran que invierten hasta el 90% de sus excedentes en educación, salud y alimentación familiar, por lo que tener ingresos contribuye a erradicar la pobreza, mejorar la educación, nutrición y salud.
Consciente de esta realidad y del rol de las mujeres como catalizadoras del progreso, la Fundación Microfinanzas BBVA pone especial atención en las mujeres para que puedan alcanzar su potencial de desarrollo económico, sostenible e inclusivo. Un claro ejemplo es Miriam Araúz, una emprendedora panameña atendida por Microserfin, la entidad de la FMBBVA en el país.
Miriam Araúz junto a su asesora de crédito en su negocio
Con cinco hijos que mantener y muchos sueños que cumplir, uno de ellos que sus hijos fueran profesionales; con optimismo se dispuso a emprender su propio negocio. Empezó vendiendo relojes por la calle, pero gracias a su empeño, creatividad e ingenio se convirtió en la dueña de un pequeño almacén, al que siguieron un salón de belleza, una hamburguesería, un taller de mecánica y varios apartamentos en alquiler. Emprendimientos que no solo fueron claves para el progreso de su hogar sino que a día de hoy, dan trabajo a otros familiares y miembros de su comunidad.
Lo que a mi me motivaba era que mis hijos, algún día, pudieran ser alguien en la vida, asegura Miriam, y yo tuve la oportunidad de ver eso. Ahora mismo, son profesionales, explica con alegría.
“Yo digo que cuando tú quieres algo tú tienes que luchar por eso y yo lo luché y hoy me siento bien realizada porque logré todo lo que pude pensar de mi vida”, afirma con mucho orgullo. Así como la de Miriam, existen más de 1.7 millones de historias de emprendedoras a las que acompaña la FMBBVA y su grupo de entidades en cinco países de América Latina, con productos y servicios financieros y no financieros, que tienen un propósito: Impulsar su desarrollo pleno y mejorar su calidad de vida y la de sus familias.
Conoce la historia completa de Miriam Araúz aquí
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