“Antes teníamos una pesca abundante por acá, ahora hay menos pesca. Antes teníamos más montes, ahora hay menos… No nos damos cuenta, pero ese repliegue de la vida salvaje también nos afecta… El medioambiente no es algo fuera de nosotros, nosotros somos el medioambiente”.
Con esta claridad se expresa Geudis Tejeda, agricultor y emprendedor de la Fundación Microfinanzas BBVA (FMBBVA) en República Dominicana. Él es uno de los más de 15.000 emprendedores a los que la FMBBVA ha apoyado en 2020 para que sus microempresas puedan adoptar medidas respetuosas con el medioambiente.
Desde la mitigación y adaptación al cambio climático y la sostenibilidad agropecuaria, a los seguros para cubrir los efectos adversos y el impacto de las alteraciones en el clima y sus consecuencias, o la instalación de sistemas de agua, saneamiento e infraestructuras sostenibles.
El medioambiente no es algo fuera de nosotros, nosotros somos el medioambiente.
El responsable de Sostenibilidad Medioambiental de la FMBBVA, Joel Hernández, lo ha explicado en el webinar “Iniciativas de Microfinanzas en América Latina en un marco de cambio climático” organizado por Helvetas, Fundación Avina, el International Institute for Sustainable Development (IISD) y el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA).
“Desde la Fundación apostamos por una estrategia de sostenibilidad medioambiental, para reforzar nuestra oferta de valor y poner a disposición de nuestros emprendedores soluciones verdes”, ha explicado Joel Hernández durante su intervención.
Como ejemplo de este compromiso de la FMBBVA por impulsar un mundo más sostenible e inclusivo, ha señalado la adhesión a los Principios de la Banca Responsable impulsados por Naciones Unidas, que refuerza “nuestro alineamiento con el cumplimento de los ODS y el Acuerdo de París”.
La importancia del acceso a financiamiento
El cambio climático es hoy uno de los mayores desafíos que enfrenta la humanidad. Aunque la mayoría de los países han adoptado medidas para reducir las emisiones de carbono y trabajan en generar condiciones que permitan a sus poblaciones y ecosistemas adaptarse a sus impactos, el alcance e implementación de muchas de estas medidas depende del acceso a financiamiento.
“Sabemos que las personas a las que nos dirigimos son especialmente vulnerables económicamente, pero a la vez, también lo son ante el cambio climático, la pérdida de biodiversidad o la degradación de los ecosistemas. Estos riesgos medioambientales afectan en mayor medida a las mujeres y las poblaciones rurales», ha explicado el responsable de Sostenibilidad Medioambiental de la FMBBVA.
“Ayudarles a que mejoren su capacidad de adaptación y que reduzcan su vulnerabilidad es fundamental para su progreso, mientras mejora su productividad, cuidan del medioambiente y desarrollan su entorno. Es por esto que impulsamos las finanzas sostenibles e inclusivas”.
Como nos recuerda Geudis Tejeda, “hay que reducir el impacto del uso del agua, del uso de energía, de combustibles fósiles, de pesticidas… vamos a reducir el uso de todo lo que pueda ser dañino a la naturaleza” porque “solo hay ahora, no hay nada más”.
Y en ese ahora es donde las microfinanzas pueden jugar un papel relevante, para ayudar a los que más lo necesitan a enfrentar este enorme reto, tanto para evitar la degradación de los ecosistemas, como para prevenir las consecuencias de ese deterioro.